Los toros de Juan Pedro Domecq han protagonizado el tercer encierro de los Sanfermines, una carrera limpia y que ha concluido en tres minutos escasos, con los morlacos abriendo la manada, sin hacer derrotes o gestos peligrosos y permitiendo algunas carreras bonitas por parte de los mozos.
Tras salir del corral, un toro negro se ha puesto al frente del grupo en la Cuesta de Santo Domingo y ha ido abriendo la carrera hasta llegar a la plaza, adelantado. El resto de la manada, se ha ido estirando en la cuesta, pero sin llegar a separarse.
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Pasada la plaza del Ayuntamiento, en Mercaderes, los tres toros negros estaban al frente del encierro, el primero, adelantado, y otros dos tirando de la manada. Así han seguido tras la curva que da entrada a Estafeta, siempre siguiendo de frente y sin feos.
En la calle Estafeta, de nuevo los morlacos estaban al frente, tirando del grupo; la caída de un mozo a mitad del tramo ha provocado la caída también de un morlaco, que se ha levantado sin problemas y ha seguido corriendo. El grupo se ha estirado mucho en esta calle y ha permitido bonitas carreras a los corredores. Los toros seguían sin hacer ningún gesto peligroso y así han llegado a la plaza, entrando en los corrales sin despistes.
Cuatro heridos
El encierro de hoy ha sido muy distinto al de ayer, con toros de Cebada Gago, que realizaron una peligrosa carrera y dejaron a su paso cuatro heridos graves, ingresados en centros hospitalarios de Pamplona. Sin embargo, los toros de Juan Pedro Domecq han corrido limpiamente todo el recorrido y no produjeron cogidas, a pesar de que tuvieron muchas posibilidades.
Pese a la limpieza con la que se ha desarrollado el encierro, como en todas las carreras ha habido mozos que han sufrido traumatismos. Cuatro corredores han tenido que ser trasladados a centros hospitalarios de la capital navarra. Uno de ellos, Orella Peinado, de 22 años, sufre un traumatismo encefálico leve y está en observación, a pesar de que estuvo tendido inconsciente en el Callejón mucho rato y fue pisado por varios toros y mozos.
La ganadería de Castillo de las Guardas (Sevilla) no visitaba Pamplona desde 1974. Los tres toros negros y los tres colorados, cuatro de ellos en los 600 kilos de peso, serán lidiados esta tarde en la plaza por los diestros Enrique Ponce, El Juli y Matías Tejela.