La asociación de discográficas independientes, Impala, ha presentado un nuevo recurso ante la justicia europea contra la decisión de Bruselas de autorizar sin condiciones la fusión entre los sellos Sony y BMG.
La Comisión Europea dio su visto bueno a la fusión de la japonesa Sony y la alemana BMG en el año 2004, pero el Tribunal de la UE anuló la autorización dos años después, tras una apelación de Impala. Bruselas reexaminó la operación y la volvió a aprobar sin condiciones en octubre del año pasado.
En un comunicado, Impala ha explicado hoy que el ejecutivo de la UE repitió "muchos de sus errores" al revisar el caso, y ha insistido en que no deberían permitirse fusiones sin imponerles estrictos requisitos para mantener la competencia, dada la elevada concentración del negocio musical.
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Además, la asociación asegura que debido a las barreras a las que se enfrentan las pequeñas compañías el 95% de la música que llega a los consumidores (a través de la radio, las tiendas e Internet) está controlada por las cuatro grandes multinacionales que dominan el sector.