La esperanza se murió en Phillip Island o más bien la mató Marco Melandri. La épica carrera y la estresante última vuelta no le sirvieron de nada a Fonsi Nieto, quien vio finalmente frustrado su sueño de ser campeón del mundo de 250 centímetros cúbicos. Hasta tres veces adelantó el madrileño al italiano en el último giro y otras tantas se vio postergado por Melandri. Al final, siete milésimas de segundo le valieron a éste para proclamarse campeón.
En un último acto desesperado, Fonsi se pegó al rebufo de la moto de Melandri en un intento de que en la misma línea de meta, sobre la raya, pudiese doblegar a su rival, como hace dos años hizo el francés Olivier Jacque con el japonés Shinya Nakano, para proclamarse entonces campeón, pero al español no le salió bien. Le faltaron escasamente un par de metros para lograr su objetivo. Siete milésimas de segundo.
La carrera tuvo dos centros de atención completamente distintos. Por una parte estaba la lucha particular de Fonsi y Melandri por el título, quienes rápidamente dejaron a todos sus rivales atrás a ritmo de vuelta rápida. Por otra, el del resto de pilotos que lucharon por la tercera plaza.
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Entre estos hubo tres que rápidamente se destacaron: el italiano Roberto Rolfo, el argentino Sebastián Porto, que fue quien subió al cajón, y el español Toni Elías. Éste, dolorido aún por la caída de los entrenamientos, desisitió pronto y se dedicó a consolidar una quinta plaza que le mantiene cuarto en el campeonato del mundo.
Pedrosa también se despide
La pérdida ha sido doble en el australiano circuito de Phillip Island. Minutos antes de que Fonsi se viera superado, la otra opción española de conseguir un título mundial este año quedó también en fuera de juego. Dani Pedrosa no pudo pasar de la quinta plaza y se ha quedado matemáticamente fuera de la lucha por el campeonato de 125 centímetros cúbicos.
La cosa queda ahora entre el francés Arnaud Vincent y el sanmarinense Manuel Poggiali, que se ha impuesto esta madrugada por delante del italiano Simone Sanna y del español Pablo Nieto, una alegría menor dentro del panorama derrotista que ha tenido este gran premio para los españoles. Sobre todo para Fonsi y esas siete milésimas que le han dejado sin esperanzas.
En Moto GP, una vez más, y ya son 11 esta temporada, el doctor Valentino Rossi ha logrado la victoria. El italiano ha sumado así su quincuagésimo triunfo en un gran premio, una bonita cifra que, dados sus 23 años, promete multiplicarse. Sólo la mayor igualdad mecánica que se vislumbra en las próximas temporadas, cuando todos los pilotos tengan motos de cuatro tiempos y 990 centímetros cúbicos, frene su incontestable superioridad.
Esta vez lo ha intentado Alex Barros, quien, en un meritorio intento de rebasar a Rossi en la última vuelta con un adelantamiento interior muy forzado, terminó haciendo un recto. Aun así, dada la gran ventaja que llevaban sobre el grupo perseguidor, el brasileño tuvo tiempo de volver a pista y de cruzar la línea de meta en segunda posición, eso sí, a nueve segundos de Rossi. El podio lo ha completado el japonés Tohru Ukawa.
"Lo he intentado todo"
"Lo he intentado todo. Al principio he tirado fuerte para seguir a Marco, después he visto que no podía escaparme y me he quedado tras él para intentar sorprenderle en la última curva, pero no lo he conseguido". Fonsi Nieto no tenía más que la resignación a la finalización del Gran Premio de Australia, que ha supuesto su adiós definitivo a las posibilidades de ganar el Mundial.
Pese a todo, Nieto se ha mostrado satisfecho con su temporada. "Esta es la primera con la moto oficial y el segundo puesto es más que importante", ha apuntado el madrileño.
Por su parte, el flamante campeón del mundo, el italiano Marco Melandri, ha destacado la "lucha intensa y limpia" mantenida durante la carrera y ha señalado la última curva como clave. "En la última vuelta Fonsi me ha pasado y ha sido difícil recuperar la posición de cabeza. En la última curva sabía que me jugaba el campeonato allí, hemos entrado los dos por el exterior y ha salido bien. Ahora yo soy el campeón", ha sentenciado.
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