Justo empate de una indolente España

En el descuento, Gorskhkov hizo justicia con un disparo desde 30 metros. Se despedía Ucrania de cualquier posibilidad tras haber estado 70 minutos por delante en el marcador y después de que un gol de Raúl y otro de Etxeberria hubieran sacado a España del pozo en el que se había metido producto de su indolencia.

El encuentro partió de las bases planteadas desde principio de la semana. No es cierto que Ucrania sea Shevchenko y 10 más, es algo más, pero no tanto como para poner en problemas a una selección como España. Así las cosas, los ucranios se parapetaron tras la línea del centro del campo y cedieron el balón y el control a los de Sáez.

Se encontró a gusto España bajo esa situación. Con Baraja y Albelda en el doble pivote y Guti de enlace, la selección se gustó tocando, pero pecó de falta de profundidad. Sin un referente arriba, España se encontró con elaboración, pero sin definición, circunstancia agravada tras el tanto ucranio, que aceleró a una España que no concretó acciones ofensivas ni disparó entre los tres palos en la primera parte.

Para colmo, la debilidad defensiva se hizo patente a las primeras de cambio. A César y Marchena, urgencia de Sáez para el centro de la defensa, no les dio tiempo ni a coger confianza. La primera vez que Ucrania pisó área, Shevchenko cruzó en semifallo un balón que, tras un terrible fallo de Casillas y Salgado, enganchó Voronin para adelantar a los suyos.

Más de lo mismo

Tras una primera parte en la que el aliento de gol sólo llegó desde el lado ucranio, España mantuvo su aspecto impotente al inicio de los segundos 45 minutos. Apenas un disparo de Guti ajustado al palo alteró ligeramente los biorritmos de la selección, que volvió a sumirse en la inefacia frente a una Ucrania solvente al contragolpe, un arma que desquiciaba de vez en cuando a la nerviosa zaga propuesta por Sáez.

Ni siquiera la entrada de Xavi y Valerón varió el argumento. En realidad, era un poco más de lo mismo ante la falta de un delantero centro claro que apuntalara a los centrales ucranios y permitiera abrir un juego que muy pocas veces se escapó del centro de la vanguardia española. Tristán apareció por el césped en el minuto 75, cuando ya parecía tarde para todos, menos para Raúl, que encontró el tanto de un empate con el que ya se conformaba la selección. Etxeberria se apuntó al festival e invitó al triunfo con otro gol que dejaba a Ucrania con una derrota injusta. Gorskhkov, en el descuento, enganchó un tiro desde su casa y materializó el justo empate.

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