Durante quince meses, las autoridades locales de Filadelfia combatieron tenazmente, por todos los canales legales a un particularísimo grupo de activistas defensores de la Naturaleza que se llaman a sí mismos Move. El martes, sin embarqo. la lucha llegó más lejos cuando la policía local de la ciudad bicentenaria norteamericana trató de desalojar, en cumplimiento de un mandato judicial. a los activistas de una casa en la que residían y en la que se habían hecho fuertes. Hubo intercambio de disparos durante medio minuto y el balance fue de un muerto -un policía- y dieciocho heridos. En las fotos; la policía muestra la violencia que se deriva de una lucha cuerpo a cuerpo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de agosto de 1978