La mitad de los maridos británicos hacen la compra familiar y el número aumenta por la crisis de empleo, según el informe Crosse y BlackweIl, recientemente publicado.Más del 16% de los maridos guisan a diario, mientras las esposas e hijas trabajan fuera del hogar, o se reservan la misión de supervisoras en la cocina, informa Efe.
Debido al desempleo en los sectores industriales, las tareas domésticas, limpieza de la casa, lavado y planchado, recaen en proporción creciente sobre el marido.
Según amas de casa consultadas, el marido británico es muy aficionado a sisar para dedicar el dinero a comprarse chocolatinas y publicaciones dedicadas a promover las reivindicaciones del varón británico.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 10 de julio de 1981