Los 48 mercados de distrito que existen en la capital se encuentran mal distribuidos y, en opinión de los propios comerciantes, poseen, en general, una infraestructura bastante deficiente, según se desprende de una encuesta encargada por el Ayuntamiento a la empresa Sofemasa. Así, por ejemplo, mientras algunos distritos, como Fuencarral, carecen de mercado y sólo tienen cuatro galerías de alimentación, los siete distritos centrales se reparten el 60% de los mercados existentes y la cuarta parte de las galerías de alimentación.
La Delegación de Abastos y Mercados del Ayuntamiento encargó el pasado año a la empresa Sofemasa un estudio sobre la situación de los mercados de distrito y las posibles alternativas que podría tomar el Ayuntamiento en caso de que decidiera gestionarlos directamente.Del resultado del informe, entregado hace unos días a los responsables de la Delegación, se desprende que en Madrid existen 10.214 puestos repartidos entre ocho mercados municipales de gestión directa, 36 de concesión y cuatro particulares. A esta cantidad habría que aumentar los 7.093 puestos de las 233 galerías de alimentación existentes y los 10.000 comercios con puerta a la calle que se calcula están abiertos en Madrid.
El primer defecto encontrado es la desigual distribución de esta dotación comercial. Frente a los no venta habitantes por puesto de mercado o galería que se registran en un distrito como el de Centro, en el de Fuencarral se distribuyen 781 habitantes por puesto, en Moratalaz 525 y en San Blas 433.
La mala distribución de la dotación comercial no afecta a los distritos de Centro, Arganzuela, Retiro, Salamanca, Chamartín, Tetuán y Chamberí, en donde están veintisiete de los 48 mercados y 55 de las 233 galerías de alimentación. No es extraño por tanto, según el informe, que mercados como el de la Cebada, construido en 1962, y con una capacidad de quinientos puestos comerciales, se encuentre semivacío ante la demanda decreciente de un barrio en el que el número de vecinos disminuye paulatinamente.
Por otra parte, una comparación de los distintos tipos de puestos comerciales existentes en los mercados totalmente municipales con la media nacional indica que en Madrid hay mayor número de fruterías, un número similar de carnicerías y hueverías y muchas menos pescaderías, panaderías, lecherías y tiendas de ultramarinos que la media nacional.
Sólo la compra de fruta, carne y pescado, representa casi un 20% del gasto del hogar. Los comercios que más venden son las carnicerías (52,7% del total) seguido de las fruterías (30%) y de las pescaderías (17,3%).
Estas ventas podrían incrementarse en caso de que variaran las condiciones de los mercados. Según la encuesta realizada por Sofemasa entre las distintas asociaciones de comerciantes de los mercados de distrito, el 70% consideraba el estado de las instalaciones del mercado en el que desarrollaban su actividad como deficiente o malo, y el 73% manifestó que no se estaba realizando ninguna obra de mantenimiento o mejora.
Uno de los problemas que más destacaron los comerciantes fue la falta de aparcamiento. De los 44 mercados de gestión directa y concesión sólo dos tienen resuelto este problema. Según el informe, un establecimiento que tenga aparcamiento exclusivo puede triplicar el área de influencia un viernes y multiplicar por cinco ésta un sábado. Este aumento se limita al 6% en caso de que el aparcamiento no sea exclusivo.
También habría que cambiar la estructura aplicada por el pequeño comerciante, cuyos mayores problemas son el minifundio, la falta de servicios complementarlos, el deterioro de la infraestructura y la oferta comercial limitada. Este carácter tradicional y familiar se refleja en que el 87% de los establecimientos de alimentación no tienen personal remunerado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 18 de febrero de 1982