Alrededor de siete millones de griegos se acercan hoy a las urnas para elegir a sus alcaldes en lo que constituye la primera prueba importante para el Gobierno socialista de Andreas Papandreu, que precisamente mañana cumple su primer año en el poder.El Gobierno del PASOK se enfrenta al desafío electoral en un momento particularmente: difícil, asediado por los ataques tanto de los comunistas pro soviéticos como de la extrema derecha, en lo que se interpreta en Atenas como un acuerdo implícito y silencioso.
La derecha griega se encuentra, por otra parte, en plena fase de renovación dirigida tanto por Nueva Democracia, partido que gobernara antes de la llegada de los socialistas al poder, como de la anterior Junta Militar de los coroneles.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 17 de octubre de 1982