Unos 30.000 trabajadores de los astilleros de todo el país secundaron ayer los paros y asambleas propuestos por la coordinadora de CCOO de la construcción naval; por ELA-STV, en el País Vasco, e INTG, en Galicia, según fuentes laborales.El paro estuvo motivado por los planes de la Administración de disminuir las subvenciones por tonelada de registro bruto construido de 750.000 a 400.000 y contra la reconversión naval, que dejaría sin empleo a 20.000 trabajadores de los 43.000 que tiene el sector.
La participación en los paros afectó a la mayoría de las plantillas de los pequeños y medianos astilleros, como Unión Naval de Levante, Navesa de Manises, Aesa de Sestao, Astano de El Ferrol, Vulcano de Vigo y Aesa de Cádiz y Huelva.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 29 de octubre de 1983