Habiendo leído EL PAIS del domingo 4 de noviembre de 1984, quiero comunicarle mi total desacuerdo con la denominación que se hace en el artículo de la página 26, titulado Policía nacional, golpeado en el momento de detener a dos gitanos, y me refiero a este último término, porque viviendo en un país constitucionalmente democrático no se debería etiquetar de esta manera a personas; de hecho, le escribo textualmente el artículo 14 de la Constitución de 1978 (que no dudo que usted sepa): "Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social".Con el artículo de la página 26 antes mencionado creo que ponen de manifiesto un cierto racismo al emplear la palabra gitanos para denominar a personas que, aunque en este caso delictivas, en definitiva son personas.
Con la utilización del término gitanos u otros raciales lo único que se hace es aumentar el rechazo que se tiene hacia tales comunidades, desgraciadamente.
En definitiva, creo que la denominación de personas es constitucionalmente más democrática y aceptable, porque al fin y al cabo personas son ante todo.
Quiero poner de manifiesto que no estoy de acuerdo con los comportamientos delictivos que puedan efectuar personas de cualquier índole.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 18 de noviembre de 1984