Diecisiete obispos católicos estadounidenses, 10 de ellos de raza negra, hicieron un llamamiento el pasado jueves a la Administración de Ronald Reagan para que "por todos los medios pacíficos de que disponga" ponga fin al "maléfico sistema del apartheid" en Suráfrica.
Los prelados, reunidos en la capital norteamericana en una conferencia anual que agrupa a los casi 300 obispos católicos del país, han especificado su demanda al pedirle al presidente Reagan que ponga fin a su política de colaboración constructiva con el régimen racista.
Igualmente, han criticado el genocidio que ese país, afirman, está llevando a cabo en Namibia, y el hecho de que "una minoría de un 16% de blancos ejerza un control brutal sobre la mayoría negra surafricana y de Namibia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 18 de noviembre de 1984