El Gobierno español estima que se han producido últimamente signos esperanzadores en la situación centroamericana y destaca los aspectos positivos del plan del presidente norteamericano, Ronald Reagan, sobre Nicaragua en cuanto supone una retirada temporal del apoyo militar a los grupos armados antisandinistas.
"Hay elementos positivos en la situación general de Centroamérica, y la reunión de Contadora, que ha sido preparada con intensidad, podría ser decisiva para el relanzamiento del proceso de paz. En este sentido, es posible que las propuestas de Reagan tengan influencia, desde el momento en que dicen apoyar a Contadora y ofrecen interrumpir el suministro a los contras durante un tiempo", explica un alto funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores.
El presidente del Gobierno español, Felipe González, declaró ayer en una conferencia de prensa celebrada al término del Congreso de la Unión de Partidos Socialistas de las Comunidades Europeas que, a su juicio, se abre una nueva vía de diálogo en Centroamérica.
La fuente diplomática española cree que no se pueden imponer desde fuera las condiciones en que debe realizarse la reconciliación nacional en Nicaragua.
"En Nicaragua, como en todas partes, debe tenderse a una participación lo más amplia posible de todas las fuerzas políticas, pero nosotros no entramos en las negociaciones internas que se puedan producir dentro de los países; ni nosotros ni Contadora".
El Gobierno español estima que si no se colocan obstáculos políticos adicionales a los ya existentes en la región, el Grupo de Contadora podría concluir su misión, que es la firma de un acta de paz para Centroamérica, en un plazo corto de tiempo.
En el marco de ese acta, según las fuentes oficiales consultadas, se debe alcanzar la reconciliación nacional en los distintos países.
La fuente diplomática española citada añadió, en relación a la aprobación de fondos norteamericanos para la ayuda a los grupos antisandinistas, que "nos parece positivo que uno de los puntos del plan de paz de Contadora sea precisamente que no se pueda desestabilizar a un país desde países vecinos".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 11 de abril de 1985