El número de casos de sífilis ha bajado drásticamente en Suecia y ello es atribuido en gran medida al temor al contagio del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA), que ha vuelto más cuidadosos y selectivos a los hombres homosexuales en sus contactos. Durante los años sesenta, y comienzos del ochenta, la sífilis había tenido una fuerte incidencia en el país, particularmente entre los hombres de condición homosexual. El mayor número de casos se registró en 1982 con 486 enfermos, descendiendo en el 83 a 352 y el año pasado a 176.
Estos datos han sido proporcionados por el laboratorio estatal de bacteriología cuyas autoridades señalan que el comienzo del retroceso coincidió con la aparición de los primeros casos de enfermos de SIDA y con la inquietud que ello provocó así como a la difusión que las autoridades sanitarias dieron a los riesgos de esta enfermedad y las formas de prevenirla.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 11 de abril de 1985