La renegociación del crédito concedido por el Banco Hipotecario a 11 clubes para acondicionar sus campos para el Mundial 82, acordada y firmada el pasado jueves entre dicha entidad bancaria y la Liga Profesional, ha dado pie a duras criticas contra la la patronal del fútbol entre aquellos otros clubes a los que no afecta esa deuda. La Liga Profesional, para devolver ese crédito, acordó destinar el 34% del 2,5% que recibirán los clubes de Primera de los ingresos de las quinielas.Los presidentes del Valladolid, Spórting de Gijón, Osasuna y Cádiz, que no recibieron ese crédito, como tampoco la Real Sociedad, Celta de Vigo, Rácing de Santander, Las Palmas y Zaragoza, no consideran equitativo y justo ese destino de los ingresos de las quinielas, al estimar que así se les perjudica, mientras se favorece a los demás. Estos presidentes se quejan también de la actitud que en casos como éste emplea la Liga Profesional por la información que proporciona y porque conocen sus acuerdos a través de los medios informativos.
Al presidente de Osasuna, Fermin Ezcurra, no le sorprende la actitud de la Liga: "Los presidentes de Primera División debieron ser consecuentes desde un principio. Entonces expuse mis quejas y me dejaron solo. Les advertí lo que ahora está sucediendo, y ahí tienen las consecuencias. También necesito yo dinero para acondicionar mi campo y no pido un crédito".
Manuel de Irigoyen, presidente del Cádiz, es uno de los dirigentes que más críticas ha dirigido a la Liga Profesional, y no está de acuerdo con la renegociación de la deuda de 11 clubes con el Banco Hipotecario. "Ese número de clubes ha resuelto sus problemas a costa de los demás. Me parece bien que se paguen las deudas de los clubes, pero equitativamente y con justicia".
Vega-Arango,cansado
El presidente del Spórting de Gijón, Manuel Vega-Arango, anterior presidente de la Liga Profesional, comentó: "Estoy cansado de clamar en el desierto. No me extraña que se produzcan decisiones como ésta cuando ya antes el comité ejecutivo de la Liga Profesional no dio explicación alguna del acuerdo firmado con TVE para la transmisión de partidos, como tampoco consultaron con los clubes sobre el alquiler o la compra -porque hasta esto desconocemos- del local de nuestra patronal".Vega-Arango contrastó su situación con las decisiones de la Liga Profesional y recordó la moratoria que tuvo que negociar con Hacienda en el pago de su deuda, con el incremento que lleva consigo el acuerdo. Lo mismo hizo el presidente del Valladolid, Gonzalo Alonso, que el día 20 negoció otra moratoria con el mismo organismo por una deuda de 51 millones.
El presidente vallisoletano también se quejó de la que considera una injusticia más de la Liga Profesional: que se le descuente la misma cantidad -seis millones de pesetas- que al Barcelona o al Madrid de los partidos televisados, cuando el Valladolid recibe 13 millones de TVE y los otros dos equipos 22 millones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 29 de enero de 1986