Tras ocho días en huelga de hambre, dos trabajadores despedidos del Grupo de Empresas Álvarez (GEA), de Vigo, consiguieron ayer que la dirección aceptase la improcedencia del despido y accediese a indemnizarles con 40 días de salario por año trabajado.Celso Campos Pérez y Antonio Saavedra Escobar abandonaron a primeras horas de la tarde el remolque en el que habían permanecido durante una semana, frente a las instalaciones de la empresa en la factoría de Cabral-Vigo. A partir de ahora podrán percibir el importe aproximado al salario correspondiente a tres años y acogerse además a las prestaciones del seguro de desempleo. El despido se produjo por presuntas irregularidades de los dos operarios durante su trabajo.
El acuerdo, que pone fin al conflicto, se alcanzó tras un largo acto de conciliación en el Instituto de Mediación, Arbitraje y Conciliación (IMAC), en el transcurso del cual no faltó un intento de retención del director de relaciones industriales del GEA por decisión del comité de empresa. Posteriormente, a cambio de la indemnización aceptada, el comité se comprometió a desconvocar los paros previstos para los días 3 y 7 del próximo mes de febrero. La empresa se había negado a iniciar negociaciones sobre los despidos, y el comité había convocado paros el pasado día 24 y ayer mismo como medida de presión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 29 de enero de 1986