La Dirección General de Instituciones Penitenciarias ha ordenado la rápida tramitación de los expecientes de siete reclusos aquejados de enfermedades graves en fase terminal que podrán beneficiarse de la libertad condicional. Entre los casos rechazados está el de Benito Ojeda Sánchez, recluso enfermo de SIDA.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 22 de diciembre de 1988