La verdad es que los fieles aficionados acudieron ayer a la Monumental con una ilusión bastante relativa, pero su constancia se vio recompensada con una más que agradable sorpresa, porque de los dos debutantes del cartel, uno revolucionó el cotarro, soñando el toreo en el quinto de la tarde. Se llama José Antonio Muñoz, tiene 19 años y es sevillano, de Sanlúcar la Mayor.En su primero, manso, pero que servía en la muleta, a pesar de salirse suelto, ya había apuntado muy buenas maneras y no le perdió la cara nunca al novillo, pero el deficiente uso del estoque lo estropeó todo. El quinto fue un novillo al que no le sobraban las fuerzas, pero de una bondad y una nobleza extraordinarias. Con estos mimbres, Muñoz hizo el cesto del mejor toreo, con hondura en las dobladas y con dos excepcionales series con la derecha., no debiendo rectificar nunca la posición para ligar los templadísimos muletazos. También llegó a gran altura con la muleta en la zurda y en los ayudados por bajo finales. Fue, sin duda, la mejor faena de la temporada.
Lupi / Rubio, Muñoz, Moreno
Cinco novillos de José Samuel Pereira Lupi, desiguales de presencia (buenos 1º y 6º, mansos 2º y 3º, extraordinario 5º); 4º de Bótoa, manso.Pepín Rubio: aviso y silencio; ovación. José Antonio Muñoz: dos avisos y ovación; oreja y dos vueltas. José Moreno: silencio y silencio. Plaza Monumental, 16 de junio. Un cuarto de entrada.
El resto ya fue otro cantar, y eso que Pepín Rubio demostró poseer condiciones. Su primero tenía indudable clase, pero el excesivo castigo en varas hizo que se agotase pronto, y la faena desembocase en la infructuosa insistencia, coronada premiosamente con el estoque. El cuarto fue protestado por los del tendido cinco, que tenían más razón que un santo. y después por toda la plaza por renquear ostensiblemente. Empujó en una vara, pero era manso y llegó andarín a la muleta, por lo que Rubio sólo pudo instrumentarle una buena serie con la derecha. Estuvo breve con la espada y salió a saludar al tercio; incluso intentó dar una vuelta al ruedo, lo que fue frenado en seco por el público. El otro debutante, José Moreno, dio muchos pases, pero siempre con vulgaridad y sin aprovechar las condiciones de los novillos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 17 de junio de 1991