Leo en la edición del pasado 2 de agosto del suplemento Madrid de EL PAÍS una comunicación sobre posible sabotaje en unos trenes firmada con las iniciales J. C.En primer lugar, tanto en el título como en el texto emplea el autor el sustantivo cercanías por trenes de cercanías: hermoso neologismo que señalo a la Real Academia.
Pero el motivo principal de estas líneas es hacerle partícipe de la amplia sonrisa que me produjo el leer "...con técnicas como la colocación del papel de estaño de los paquetes de tabaco..." El papel (mejor hoja) de estaño se usó en tiempos de mis abuelos para envolver herméticamente chocolate y ciertas tabletitas de medicamentos como chocolates purgantes, etcétera. Pero hace ya muchísimo que se abandonó, y lo que hoy envuelve nuestras cajetillas es papel (u hoja) de aluminio, y es lo que todos seguimos llamando, como antes al de estaño, papel de plata.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 11 de septiembre de 1991