Una decena de personas, dos de ellas policías, resultaron heridas anoche en el barrio de la Malvarosa, de Valencia, al cargar fuerzas antidisturbios contra una manifestación de unos 3.000 vecinos que protestaban contra la presencia de drogadictos en la zona . Algunos vecinos respondieron a la carga con la quema de contenedores de basura y lanzando cócteles molotov y macetas, según el delegado del Gobierno en Valencia, Francisco Granados. Éste aseguró que los vecinos "endurecieron" la actuación policial "poniendo a niños en primera fila". Los habitantes de este barrio se manifiestan desde hace 11 días para expulsar a los toxicómanos de la zona. Al cierre de esta edición continuaban los saltos por el barrio.Fuentes vecinales señalaron que poco depués de las ocho de la noche de ayer, cuando un grupo de ellos se encontraba en las inmediaciones de las llamadas Casitas Rosas (donde presuntamente se concentra gran parte del tráfico de drogas de la ciudad), la policía cargó "de forma brutal". Estas fuentes indicaron que la policía disparó cañones de agua y pelotas de goma.
"Han puesto el barrio en pie de guerra", manifestó José Barrio, un vecino de la Malva-Rosa que presenció los hechos. Según este vecino, la actuación de la policía fue contraproducente y llega cuando la mayoría de los vecinos se ha impuesto sobre algunos incontrolados que llegaron a apalear a drogadictos.
El delegado del Gobierno acusó anoche a los vecinos de provocar el endurecimiento de la carga. "Han puesto a niños y ancianos en primera línea y han tirado cócteles molotov y macetas" dijo Granados para justificar las lesiones de algunos niños. El delegado añadió que los vecinos ,están dirigidos", aunque no especificó por quién.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 8 de octubre de 1991