Efectivos de la Ertzaintza (policía atonómica vasca) han descubierto en las inmediaciones de Hernani (Guipúzcoa) un zulo (depósito de armas) que contenía 75 kllogramos de explosivos, asi como granadas y diverso material electrónico. Parte de este material podía haber servido para la fabricación los coches bomba activados por control remoto que ha utilizado ETA en sus pasadas campañas. Los explosivos y el resto del material fueron localizados días atrás en el interior de dos bidones de plástico enterrados en un paraje próximo a la carretera que comunica Hernani con la población navarra de Goitueta. Todo hace suponer que el material, presumiblemente destinado al comando que opera en Guipúzcoa, ha permanecido inmovilizado a lo largo del pasado año.
La Ertzaintza cree que los activistas operativos que actúan en esta provincia desconocían la existencia del zulo y consideran que este hecho se explica por la ruptura de los contactos internos de la organización que trajo consiguo el desmantelamiento en Bidart (Francia) de la cúpula de ETA. A su juicio, la caída de Artapalo puso al descubierto a buena parte de la infraestructura de ETA en el interior (País Vasco) y produjo como efecto inmediato la incomunicación en la organización.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 20 de enero de 1993