La dirección del PSOE garantizó ayer a la de UGT el cumplimiento de los acuerdos alcanzados sobre la ley de huelga. Una representación de la ejecutiva del partido socialista -encabezada por el vicesecretario general, Alfonso Guerra, y por el secretario de organización, Txiki Benegas- se trasladó hasta la sede ugetista para mantener una reunión con los máximos dirigentes del sindicato. La reunión contribuyó a suavizar las tensiones que han bloqueado durante los últimos años las relaciones entre ambas organizaciones, aunque el secretario de UGT, Nicolás Redondo, dejó bien claro que ni habrá acuerdos globales ni en ningún caso se recomendará el voto para el PSOE.Al término de la reunión, Guerra acusó al presidente de la CEOE, José María Cuevas, de ser el candidato para presidir, 'formal o informalmente", un hipotético Gobierno del PP.
Horas antes, en Córdoba, el presidente de la patronal desveló el contenido de una reunión de la directiva de la CEOE con Serra el pasado 21 de diciembre: "Nos transmitió que él, el Gobierno y el presidente no estaban de acuerdo con el proyecto de ley de huelga que había acordado el partido so cialista con los sindicatos". Cuevas añadió: "Nos pidió que no hiciésemos pública esa posición, por razones obvias que he respetado hasta el día de hoy; pero como no ha cumplido sus compromisos, me siento liberado".
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 16 de marzo de 1993