La normalidad fue la tónica dominante en el último día para entregar la declaración de la renta positiva (que resultara a ingresar), registrándose escasas colas de contribuyentes en las delegaciones de Hacienda.A partir de ahora, quienes no hayan cumplido con su obligación fiscal se verán forzados a pagar un recargo del 10% si efectúan el ingreso en los próximos tres meses y un 50% si la demora es mayor.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 22 de junio de 1993