La falta de confianza de los directivos españoles consultados no se restringe sólo a las cifras macroeconómicas. Los datos presentados por el Foro Económico Mundial revelan que los ejecutivos españoles tienen menos confianza en la administración de justicia que cualquiera de sus colegas occidentales, incluyendo Italia, Grecia y Turquía. La motivación de los trabajadores españoles, la calidad de los productos nacionales o la cooperación en investigación entre empresas y universidades son otros tantos aspectos en los que, según los ejecutivos españoles, España se sitúa a la cola del mundo industrializado."De hecho, el informe refleja un clima de opinión que no tiene nada que ver con la competitividad", según el secretario de Estado de Industria, Álvaro Espina. Industria desconfía de una clasificación que coloca a países como Irlanda, Portugal o el Reino Unido como más competitivos. "Con las mismas empresas operando en ambos países [España y Reino Unido], una multinacional como Ford opta por España y trae el nuevo modelo Sigma aquí", dice Espina.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 22 de junio de 1993