El final de la semana ha supuesto un ligero respiro para la Bolsa. La situación está encalmada: ni el Bundesbank ni la Reserva Federal tocaron sus tipos anteayer y la reunión en Nápoles del G-7 tampoco produjo ningún mensaje claro, ni jueves ni viernes. Así que el mercado madrileño decidió que tampoco los necesitaba, negoció unos notables 34.680 millones de pesetas, y se mantuvo al alza todo el día, llegando a subir hasta tres puntos. Al final, la subida quedó en 1,91 puntos -aproximadamente un 0,65%- y el índice en el 293,56%. El Ibex 35 subió 24,82 puntos (0,80%) y acabó en 3.118,60.El punto de inflexión entre la subida de tres puntos y la ganancia final de menos de dos se dio a primeras horas de la tarde, cuando se conoció el buen dato de desempleo en EE UU. El descenso del paro lleva a los inversores a pensar que la recuperación estadounidense es mejor de lo esperado, lo que puede disparar la inflación y ocasionar por tanto una, subida de los tipos de interés. El mercado parece dispuesto a aceptar que la Reserva Federal suba sus tipos para sostener el dólar, pero no para prevenir la inflación.
Las Bolsas internacionales se comportaron de forma distinta: las europeas continentales -París y Francfort-, subieron, y la de Londres bajó. París tuvo una mínima subida de 0,03 puntos, que ni siquiera permite calcular un porcentaje, y Francfort ganó un 0,34%. Londres descendió un 0,07%. Wall Street, mientras, cerré con una ganancia de 20,72 puntos, a pesar de que tuvo una apertura a la baja.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 9 de julio de 1994