Yvonne Pomfine, de 51 años y nacionalidad francesa, falleció ayer al incendiarse el dormitorio de su casa, situada en el piso octavo de la calle de Alberto Alcocer, 5, en el distrito de Chamartín.
El cadáver de la mujer fue encontrado por los bomberos alrededor de la una y media de la tarde de ayer, cuando, alertados por los vecinos, acudieron al inmueble. Allí, tras apagar las llamas de la habitación incendiada, hallaron el cuerpo sin vida de Yvonne tendido debajo de la cama.
Las causas del siniestro son aún desconocidas, pero, según informaron ayer los bomberos, lo más probable es que la fallecida se quedase dormida en la cama con un cigarro encendido.
Esta explicación se basa en el hecho de que el fuego afectase principalmente al colchón y al mobiliario del dormitorio de la víctima. A pesar de esto, los bomberos tampoco descartaban ayer la hipótesis de un cortocircuito.
Pomfine residía en la vivienda en régimen de alquiler. La muerte no le llegó como consecuencia directa de las llamas que afectaron a su habitación, sino por los humos y los gases respirados. "No pudo reaccionar y se ahogó", comentaba un portavoz de los bomberos. Su cuerpo, que fue trasladado ayer al Instituto Anatómico Forense, no presentaba quemaduras importantes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 5 de octubre de 1994