"Es, sin discusión, el mejor piloto de la era moderna".. Este elogio dirigido al alemán Michael Schumacher, más propio de una abuela orgullosa, cobra todo su valor sabiendo que llega de los labios de nada menos que Alain Prost, el tetracampeón mundial de fórmula 1. La fantástica victoria de Schumacher en Jerez el domingo pasado le ha abierto las puertas del panteón de los grandes y, además, le ha colocado a un paso de convertirle, a los 25 años, en el campeón más joven de la historia de la fórmula 1.Al coro se sumó el legendario Jochen Mass, el último alemán en ganar un gran premio antes de Schumacher. "La de Jerez fue su mejor victoria", dijo Mass. "Fue un trabajo brillante. Creo que la ganó tanto en la preparación como en la propia carrera. Estaba dispuesto a ello y preparado para lo que pasara".
Prosisiguió sin quedarse corto: "La forma en que ha retornado después de la suspensión por dos carreras es impresionante", añadió el piloto francés, que tuvo que superar al alemán para conseguir la pasada temporada su cuarto título mundial. "Fue una victoria del hombre justo, de la moralidad y de la justicia. Es tan fuerte y tiene tanto talento y tanta fuerza psicológica... Ya ha dado el paso decisivo para suceder a los grandes del pasado".
Schumacher tiene una ventaja de cinco puntos sobre Hill a falta de dos grandes premios. Si el alemán de Benetton no puede asegurarse la corona de laurel el 6 de noviembre en Japón tendrá su última oportunidad una semana después en Adelaida (Australia).
El futuro de Schumacher sigue en el aire, con crecientes rumores de su paso a un presumible nuevo equipo McLaren-Mercedes. Ron Dennis, el patrón de McLaren, se irritó tanto ante el rumor de que ya ha firmado un compromiso con Mercedes que perdió las formas en una conferencia de prensa. "Le diré si he estado en Mercedes la pasada semana si usted me dice la última vez que ha hecho el amor", contestó Dennis a una periodista francesa curiosa.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 18 de octubre de 1994