El anuncio de que el PSOE propondrá libertad total de horarios comerciales a partir del año 2000 suscitó ayer reacciones encontradas, todas ellas en consonancia con las posiciones preconcebidas. Así, la Unión de Consumidores de España (UCE) hizo pública ayer su "postura favorable", puesto que la libertad de horarios "beneficia considerablemente al consumidor". porque "se adapta a las nuevas necesidades de los ciudadanos". La UCE estima que "existe espacio comercial suficiente para la convivencia entre pequeño comercio y grandes superficies".Miquel Roca, portavoz de Convergencia i Unió, se mostró "radicalmente contrario" a la apertura comercial en domingo. "El mundo del comercio se manifiesta muy masivamente en contra de esta medida", aseveró. La Confederación Española de Comercio (CEC) asegura que "es un error mantener una fecha fija para la libertad total de horarios".
Javier Gómez Navarro, ministro de Comercio, confirmó ayer en Oviedo el plan liberalizador y advirtió que "el que crea que puede gestionar su negocio como hace 20 años está muy equivocado". "El Gobierno pretende garantizar la imprescindible supervivencia de las grandes superficies y del pequeño comercio, y éste último debe buscar la fórmula para modernizarse en ese plazo" dijo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 18 de octubre de 1994