Ventura Pérez Mariño, diputado independiente y portavoz del Grupo Socialista en la Comisión de Justicia e Interior intervino ayer ante el ministro Juan Alberto Belloch y logró irritar a la mayoría de sus compañeros de escaño. Aunque ninguno quiso manifestarse expresamente, al concluir la sesión vertieron juicios muy duros contra la intervención de su portavoz. Pérez Mariño manejó argumentos como el de la imposibilidad de "encubrirse bajo secretos sumariales" y aseguró que no, es posible "instalarse en la presunción, de inocencia" porque "no es una excusa válida en la vida política".El portavoz socialista dijo que hablaba en nombre de las bases del partido y de los diputados, para asegurar que ellos creen las afirmaciones exculpatorias de Felipe González y del ministro Belloch, pero que "es necesario hacer verosímiles esas verdades para nosotros y para la sociedad".
De Amedo y Domínguez dijo que no hay que creerles, pero tampoco "desdeñar sus declaraciones, sino que es necesario clarificarlas y comprobarlas".
Para Pérez Mariño, "el Gobierno no ha sido especialmente rápido en su respuesta y ha resultado parco en las explicaciones".
Uno de los argumentos que mayor indignación había causado entre los socialistas fue, según Pérez Mariño, que "hemos tenido la suerte" de que hayan funcionado dos instituciones: los jueces y los medios de comunicación, y calificó de "hito de la entronización de la libertad de expresión", el que se hayan difundido informaciones sobre los GAL "con independencia de su finalidad". El diputado independiente en las filas del PSOE concIuyó que, "sea cual sea" el precio que haya que pagar, "será más barato que el silencio perturbador", y pidió al Gobierno que "no ceje, que investigue, que sea transparente y rápido".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 31 de diciembre de 1994