Una sobredosis de barbitúricos causó la muerte de Florián Díaz Pérez, de 35 años, cuando se encontraba detenido el pasado domingo en una de las celdas de la comisaría de Fuenlabrada (165.000 habitantes), según indicaron fuentes judiciales de la localidad. El cadáver no presentaba signos de violencia externa.Florián Díaz fue encontrado muerto a las nueve de la mañana por un policía, tras ser detenido tres horas antes por intentar sustraer la radio de un coche. Una hermana comentó a los agentes que la víctima era seropositivo y adicto a las drogas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 24 de enero de 1995