Los datos del comportamiento de los precios al por mayor en EE UU durante el mes de agosto afianzan las opiniones de los que creen que se desvanece la amenaza de inflación. El descenso del 0,1% en el Índice de Precios al Consumo superó las estimaciones de Wall Street, que había apostado por una subida del 0,1%. En julio no se alteró el índice. Es la disminución más notable de los precios al por mayor de los últimos once meses, desde el descenso del 0,4% en octubre de 1994.
Las claves que explican la cifra de agosto están en los precios de la energía, que han disminuido un 0,9%, arrastrados por la gasolina, que ha bajado un 1,9%. La alimentación, otro indicador clave por su volatilidad, no varía. Las materias primas, que ya en julio habían descendido un 0,8%, mantienen la tendencia y caen un 1,4% en agosto.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 13 de septiembre de 1995