Irregular, pero con tendencia al alza, la Bolsa de Madrid logró ayer apuntarse una subida de 1,08 puntos para situarse en un cierre de 317,81 puntos, muy cerca del máximo del año que se produjo el pasado 16 de agosto cuando el índice llegó a los 318,90 puntos. El hecho de que el nivel se halle alto produce la lógica cautela entre los, inversores. La decisión de CiU de presentar una enmienda a la totalidad de los Presupuestos de 1996 frenó la contratación aunque posteriormente se logró volver a la actividad. El mercado espera para hoy tres datos de vital importancia: el índice de precios al consumo de agosto, la cifra de paro registrado y los certificados de depósitos del Banco de España. Para los tres datos existen rasgos de optimismo. En principio, nadie cuenta con una rebaja de los tipos de interés aunque la tendencia es a la baja en el futuro. Ayer el volumen de contratación se situó en los 30.720 millones de pesetas, es decir, casi el doble de la media de la última semana. Los mercados europeos se apuntaron ayer una jornada sin demasiadas emociones. París y Francfort obtuvieron pequeñas ganancias, mientras que Londres tuvo un ligero retroceso.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 13 de septiembre de 1995