España fue en 1995 el quinto país del ranking de cumplidores de la Unión Europea (UE) en la trasposición de directivas comunitarias, es decir, de su incorporación a la legislación nacional, según el decimotercer informe sobre la aplicación del derecho comunitario, hecho público ayer.Los ámbitos legislativos donde España ha ido más lenta en su adaptación son el empleo y la política social, los contratos públicos y la política de competencia. Los más atrasados, en promedio, son el medio ambiente, el transporte y la energía.
En las infracciones, España ocupa también un lugar correcto: recibió 81 de las 1.016 cartas de emplazamiento. La superaron Francia, Alemania, Dinamarca, Grecia, Portugal e Italia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 24 de julio de 1996