Una especie de bolsa que se aprecia en Eoalulavis pertenece al aparato digestivo del animal y en ella los paleontólogos han identificado partículas diminutas de esqueletos de crustáceos. "Es la evidencia más antigua de dieta de aves" dice Sanz. "Aunque es pronto para asegurarlo, estos animales tendrían hábitos acuáticos o semiacuáticos, "tal vez como los correlimos actuales que revolotean por la orilla de ríos y lagos".Se aprecian costillas, el esternón y los huesos de las alas en el fósil de Eoalulavis. Una pieza interesante es la fúrcula, el hueso en forma de horquilla que se saca del pollo asado para el típico juego del deseo, en el que gana el que se queda con la parte mayor del hueso al tirar. "Esta estructura permite la actuación de los músculos de las alas, lo que indica que Eoalulavis, tenía una alta capacidad de vuelo".
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 1 de agosto de 1996