La justicia belga está examinando el origen de 23.000 millones de francos belgas (unos 93.400 millones de pesetas) de clientes belgas del banco Kredietbank Luxembourg (KBL), por un posible fraude fiscal en Luxemburgo. La Bolsa de Bruselas confirmó el pasado martes que también ha iniciado una investigación judicial sobre posibles maniobras fraudulentas dentro de un "importante banco belga", sin referirse explícitamente a ninguna entidad.El equipo de investigación estima que existen entre 300 y 400 cuentas de ciudadanos belgas con un importe total de 23.000 millones de francos belgas en dicho banco luxemburgués. El KBL es uno de los primeros bancos de Luxemburgo, y forma parte del holding belga Almanij, en el que también participa el banco flamenco Kredietbank (KB).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 9 de agosto de 1996