Más de 500 personas participaron, durante la jornada de ayer, en las tareas de rescate en la zona de la catástrofe. Unos 70 militares se trasladaron a Biescas el mismo miércoles por la noche. Ayer fueron reforzados con efectivos de la Brigada de Cazadores y de la Escuela Militar de Alta Montaña de Jaca, hasta un total de 250, equipados con grúas y transportes oruga de montaña (TOM).Junto con los militares trabajaron miembros de la Guardia Civil, así como numerosos voluntarios de la Cruz Roja y Protección Civil. Fuentes de la Diputación de Aragón explicaron que muchos médicos, asistentes técnicos sanitarios (ATS) y asistentes sociales procedentes de toda la comunidad autónoma y de otras limítrofes se ofrecieron para auxiliar a las víctimas.
Las muestras de solidaridad llegaron desde toda España: una dotación de la Brigada Móvil de la Ertzaintza se dirigió ayer a la zona afectada con varios equipos electrógenos, para que se pudieran continuar durante la noche los trabajos de búsqueda de víctimas; mientras que la Diputación de Sevilla envió seis especialistas en tareas de rescate.
Varios helicópteros sobrevolaron durante todo el día el barranco de Arás y el de Sía, así como el cauce del río Gallego. En la operación participaron igualmente equipos de buceadores y espeleólogos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 9 de agosto de 1996