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Los trabajadores despedidos en Arganda vuelven a su encierro

Los 28 trabajadores despedidos en Arganda del Rey (29.000 habitantes) por el equipo de gobierno, del PP, volvieron ayer a su encierro dentro del edificio del Ayuntamiento, después de que durante todo el fin de semana se les hubiera impedido su acceso. Los trabajadores llevaban nueve días de encierro cuando el sábado pasado se les impidió, según el Consistorio por motivos de seguridad, seguir en el edificio. Pero ayer, antes del cierre de las dependencias municipales al público, los trabajadores se dirigieron a las plantas altas del centro y, para su sorpresa, los guardias jurados les comunicaron que no existía problema en que entraran y salieran. "Han entendido que en medio de la plaza, con las tiendas de campaña, se nos ve más que metidos aquí dentro", afirmaba uno de los despedidos.Todos agradecían el aire acondicionado, que hacía muy diferente la permanencia a la que han tenido que aguantar durante tres días, comiendo y durmiendo en plena calle.

Lo que no ha variado es la solidaridad entre los de dentro y los de fuera. "Cuando llega la hora de comer ponemos dinero a escote entre todos y tiramos de las bolsas con comida que nos traen del exterior", cuentan. También se sienten más seguros dentro: durante el fin de semana han tenido choques con algunos vecinos. "No es una actitud generalizada, pues el pueblo en general entiende lo que está pasando y nos apoya", aseguran. Entre los 28 despedidos, que en total cobran 65 millones de pesetas al año, hay una buena parte de barrenderos que serán sustituidos por trabajadores de una contrata privada. El resto son funcionarios de servicios de planificación familiar, cultura y juventud.

Los trabajadores aseguran que sus ánimos no decaen: "Seguiremos aquí hasta Navidades si es preciso". Carlos Calle, secretario de CC OO en Arganda, considera que la presión social es la única solución. "La negociación con este equipo de gobierno siempre ha sido difícil". El encierro seguirá a diario y los lunes se celebrará una concentración en la plaza. A la de ayer acudieron 800 personas.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 20 de agosto de 1996