Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra
CARTAS AL DIRECTOR

Lloro a Elisabeth Ramírez Cuadros

Bastante mal andaba yo este mes de agosto por la tragedia de Biescas cuando he tenido conocimiento de la muerte de la niña Elisabeth Ramírez. No quiero distinguir el dolor de cualquier muerte que nos rompe en mil pedazos, por injusta o inesperada. Pero hoy lloro por Elisabeth porque ilustra la muerte más terrible con la que nos podemos encontrar en la vida, y la que no aceptaremos, sencillamente, porque pertenece a esos sucesos que nos llenan el alma de tristeza y desolación. Siento no poder rezar. No sé. Pero hoy estoy lleno de tristeza por esta tragedia que se ha llevado a personas como Elisabeth. Estoy seguro que era una niña fantástica. Desde mi afecto solidario de ciudadano anónimo, lloro por ella y por todas las víctimas inocentes.- .

* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 20 de agosto de 1996