Los especialistas aconsejan que las personas que deban de someterse a análisis rutinarios de sangre vigilen especialmente su nivel de transaminasas, con el fin de detectar precozmente la presencia del virus de la hepatitis C, que puede derivar hacia una cirrosis crónica en un 20% de los casos. Por el contrario, un tratamiento precoz durante un año cura de esta infección al 60% de quienes la contraen.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 30 de septiembre de 1996