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CARTAS AL DIRECTOR

Aventura

Si quieres imaginarte el temple que deben haber tenido los conquistadores y descubridores que de Extremadura partieron hacia América, atrévete a experimentar el excursionismo de aventura sin que te cueste un duro, desde Ciudad Real hacia Cáceres o Badajoz. Apertréchate bien de gasolina en Piedrabuena, porque durante 150 kilómetros no avistarás una sola gasolinera, y adéntrate en una sinuosa y pésima carretera de Piedrabuena a Herrera del Conde, donde experimentarás la más completa soledad, interrumpida de vez en cuando por algún camionero y por el río Guadiana.Llegando a Herrera del Conde, a ras del suelo de la carretera (?), que está huérfano de indicaciones camineras, tomarás la huella, porque no es más que eso, estrecha y sinuosa que te conducirá hasta Talarrubias -¡al fin, una gasolinera!-, y de ahí, unos 10 kilómetros más de una carretera aceptable hasta Casas de Don Pedro, donde -¡oh ventura!- accederás a una buena carretera que te llevará hacia el destino que elegiste, Cáceres o Badajoz, y que te deparó, sin comerlo ni beberlo, desde Castilla-La Mancha, la mitad del recorrido por lo menos, una verdadera odisea, que te demostró que en cuanto a turismo no es oro todo lo que reluce-

* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 11 de octubre de 1996