Las autoridades postales italianas han tenido que pagar peaje para emitir un sello con la efigie de Papá Noel, porque si no éste no hubiera dado permiso para utilizar su imagen. Y es que Papá Noel es un napolitano de 48 años, ex empleado de los ferrocarriles, jubilado, casado y con dos hijos, y que se llama Armando Narciso, apellido que parece venirle al pelo. Narciso decidió en 1991 acudir al registro y patentar el nombre del personaje navideño, con tanto éxito que Correos se ha visto obligado ahora a solicitar su acuerdo para usarlo. A cambio, le han regalado un montón de postales con su imagen y han accedido a su, petición de que el sello fuera presentado en Nápoles. Narciso asegura que no se apropió del barbudo blanco del trineo tirado por renos por motivos económicos, sino para que los niños tengan una dirección a la que escribir. Ya ha- recibido 6.000 cartas y muestra orgulloso la autorización del Ministerio de Industria para ser Papá Noel, los derechos de autor y la declaración de protección de la figura. En la Nápoles donde, al día siguiente de establecerse la obligatoriedad de los cinturones de seguridad, ya se vendían camisetas con el cinturón pintado, es previsible que se formen colas de tres en fondo para patentar los nombres de los Reyes Magos. Con la Virgen y san José pueden tenerlo, quizá, un poco más crudo.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 20 de noviembre de 1996