Más de 700 musulmanes de la secta suní asaltaron e incendiaron ayer el centro cultural iraní de la ciudad de Lahore, en Pakistán, en venganza por la muerte de su líder el sábado en un atentado con bomba en el que murieron 25 personas.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 20 de enero de 1997