La Comisión Europea propuso ayer adelantar a octubre del año 2000 la circulación de billetes y monedas del euro. Según las previsiones aprobadas en la cumbre de Madrid, la circulación física de la nueva divisa europea debe empezar el 1 de enero del año 2001.Esa fecha tiene la virtud de ser el inicio de los ejercicios fiscales de las empresas y, en general, de los Presupuestos de los Estados miembros. Pero tiene inconveniente: es festivo, coincide con las fiestas navideñas y, sobre todo, con las rebajas, una campaña básica para el comercio minorista.
La Comisión considera que octubre está lo bastante alejado de las fiestas de Navidad como para que la población se haya acostumbrado a su uso cuando éstas, lleguen y no se retraiga el consumo por tener que pagar en euros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 16 de mayo de 1997