La diócesis de Dallas (Tejas), condenada hace dos semanas a pagar una indemnización de 18.000 millones de pesetas a las víctimas de los abusos sexuales cometidos por un sacerdote, sugiere que los padres de los niños son tan responsables como el sacerdote condenado, Rudolph Kos. En una entrevista al diario The Dallas Morning News, el ex número dos de la diócesis, monseñor Robert Rehkemper, afirma que los padres deberían sentirse tan avergonzados como la propia Iglesia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 10 de agosto de 1997