¿Se trata realmente de Radio Nacional o de una sucursal de la funeraria? Radio Nacional 1 no sólo destaca en primeros titulares cualquier tipo de muerte, sino que le dedica después más tiempo que a ninguna noticia. Cualquier muerte le sirve para someternos a una siniestra sesión sadomasoquista: desde los estadísticamente normales y cotidianos accidentes de tráfico, o los de trabajo, pasando por las catástrofes naturales, hasta los asesinatos de todo tipo, mejor si son sexuales; capítulo aparte merecen los crímenes de ETA, de los que RN 1 -en eso, como algunos otros medios- se hace gigantesco y prolongado eco. Los detalles, explicaciones y comentarios mortuorios de RN 1 son tan variados como morbosos, innecesarios e irrespetuosos para con las víctimas, sus familias y, por supuesto, los radioyentes.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 1 de septiembre de 1997