La ausencia del obispo de Segovia, Luis Gutiérrez, protagonizó parte de la fiesta de los periodistas segovianos, quienes habían concedido al prelado de la diócesis el Premio Domine Cabra, en recuerdo del siniestro personaje de la obra El buscón, de Francisco de Quevedo, por su hermetismo y excesivo distanciamiento con los medios de comunicación. El presidente de la Asociación de la Prensa de Segovia, Alfredo Matesanz, explicó durante la cena patronal que el obispo se había enojado por esta decisión, optando por rechazar el premio, lo que fue recibido con silbidos de muchos de los presentes. Quien sí encajó un galardón similar, aunque con ácido humor, fue el presidente de la Diputación, Atilano Soto, también responsable de la Federación Regional de Municipios y Provincias, titular del Consejo de Administración de Caja Segovia, además de consejero en fundaciones y empresas como Azucarera Ebro Agrícolas. Precisamente el "exceso" de trabajo que proporciona a los periodistas tanta acumulación de cargos fue lo que motivó el galardón para Soto. El premio positivo, denominado San Frutos, en honor del patrón de Segovia, fue otorgado a los hermanos Angel y Jesús Serrano, responsables de la galería de arte La Casa del Siglo XV, por su cordialidad y colaboración con los informadores.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 27 de enero de 1998