El adversario del PSOE es el Partido Popular, y no CiU o el PNV. Es más, la crítica a los nacionalistas beneficia al PP y al Gobierno. Esta es la reflexión que ayer salió de la reunión del Grupo Parlamentario Socialista provocada por su portavoz, Juan Manuel Eguiagaray, y avalada por los parlamentarios socialistas catalanes. La conclusión fue la de que, si se repite que "Aznar está hipotecado por Pujol, los españoles votarán masivamente a Aznar para que se desprenda de la atadura", según se dijo en esta reunión, que congregó a diputados y senadores socialistas y en la que se renovó la confianza en Eguiagaray, para el Congreso y en Juan José Laborda en el Senado.
"Regresión democrática y regresión social". Estas son las dos expresiones que el PSOE tratará de que calen en la opinión pública como resultado del Gobierno del PP. Los socialistas todavía se siguen maravillando de la eficacia del mensaje que contra ellos lanzó el PP sobre "la corrupción y el despilfarro".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 11 de febrero de 1998