Unos 700 trabajadores agrícolas nigerianos han sido abatidos por los servicios de seguridad de Guinea Ecuatorial y enterrados en una fosa común entre los pasados 22 de enero y 4 de febrero, según informó ayer la agencia estatal nigeriana NAN, que citaba al diario de Lagos Daily Champion. Esta información fue atribuida a William Umar, portavoz de la comunidad nigeriana en Malabo, quien asegura haber escapado a las redadas masivas de la policía.
Fuentes de la oposición democrática de Malabo consultadas ayer por EL PAÍS aseguraron no tener noticia de dichos asesinatos y destacaron que la mayoría de los nigerianos residentes en Guinea Ecuatorial se dedica al comercio.
Umar aseguró que las matanzas comenzaron tras los enfrentamientos étnicos entre la mayoria fang y la minoría bubi de Guinea, esta última implantada en la isla de Bioko (antigua Fernando Poo). Al menos seis personas murieron el 21 de enero en un confuso incidente ocurrido en Bioko, del que el Gobierno del presidente Teodoro Obiang responsabilizó a separatistas bubis apoyados por nigerianos. Malabo y Lagos mantienen una disputa por el control de los yacimientos petrolíferos recientemente descubiertos en el golfo de Guinea.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 11 de febrero de 1998