Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra

La guerrilla se atribuye la muerte del vicepresidente de Sudán

El vicepresidente sudanés, el general Al Zubair Mohamed Saleh, perdió ayer la vida junto con varios ministros al estrellarse el avión en el que viajaban. El titular de Información y Cultura, que logró sobrevivir, comunicó anoche que 26 de los 57 pasajeros que iban a bordo murieron. La guerrilla, que controla una parte importante del sur de Sudán (el país más grande de África) reclamó la autoría del derribo, hecho no confirmado por el norte.

El aparato cayó en Nasir, una pequeña localidad situada a 700 kilómetros al sur de la capital, no lejos de la frontera etíope y controlada por un antiguo rebelde, Riek Machar, hoy aliado del Gobierno. La noticia fue dada a conocer por el propio presidente, Omar Hassan al Bashir, en una alocución televisada.

Sudán vive una cruenta guerra civil que enfrenta al norte (gobierno islámico denostado por la comunidad internacional, que lo considera terrorista) y el sur, donde una poderosa guerrilla cristiana es apoyada indirectamente por Estados Unidos a través de tres países amigos: Uganda, Etiopía y Eritrea. El hecho de que el avión se estrellara cerca de la frontera etíope hace pensar que no es tan descabellada la idea de una acción guerrillera.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 13 de febrero de 1998