El nuevo césped de Vallecas se somete a una cura de urgencia. A causa del embate de las lluvias del pasado enero, la hierba se ha deteriorado. La Comunidad de Madrid y el Rayo Vallecano han acordado instalar nuevos tepes de césped, de cinco centímetros de grosor, para una superficie maltrecha de 1.000 metros cuadrados -el campo tiene 6.500-, además se sembrará de nuevo todo el campo. Las autoridades regionales y la directiva vallecana esperan acometer las obras en un plazo máximo de nueve días. Para el sábado 28 de febrero, el Rayo Vallecano debe jugar en su campo ante el Lleida.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 21 de febrero de 1998