Los cadáveres de tres de los nueve pescadores desaparecidos la semana pasada a unas 45 millas al noroeste de Agadir -su base-, en aguas de Marruecos, fueron recuperados ayer en avanzado estado de descomposición. Sebastián Breva, portavoz de la compañía naviera del barco siniestrado, el Peix del Mar VII, confirmó que son de tres de los tripulantes marroquíes, pero no supo concretar si los barcos que los han recobrado se los encontraron flotando sobre las aguas o enganchados en sus redes. Catorce eran los hombres que vieron en la madrugada del día 18 cómo su buque era engullido por el océano en apenas medio minuto, según el relato de los supervivientes. Entre estos cinco había dos españoles, Eugenio Orobio y José Antonio Fernández, que fueron capaces de resistir nadando durante doce horas. Sin embargo, el patrón, Luis Mateo, y otros dos compañeros no pudieron hacerlo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 25 de marzo de 1998